Fastidiosa presencia.

Es por demás, la fastidiosa presencia de los programadores musicales en las estaciones de radio, han logrado que un buen número de personas tiendan hacia la alienación del medio.

Desde que México conoce la radio, los contenidos en el país han estado marcados por los intereses comerciales de las empresas patrocinadoras, los famosos jingles eran anuncios de enorme tamaño que por medio de la aparición de cómicos o cantantes de moda presentaban el producto, los regulares Manolín y Shilinsky, clones de Viruta y Capulina solo que con pesos diferentes, eran uno de tantos artistas que presentaban el producto y que hacían recordar lo tremendamente importante que es tener Vitacilina en la oficina porque es una buena medicina; o si te dolía la cabeza cafiaspirina es la solución, y si el niño se siente mal mejoralito es la solución para el mal estomacal .

La radio ha cambiado tanto desde entonces, pero siempre haciendo el copy paste con los gringos, cuando surgió WFM o ROCK 101 no había más que sintonizar algún show de los Ángeles para notar las enormes similitudes entre el formato de producción y la programación de estas estaciones. Grupos como Toto, Journey y Yes , eran moneda de cambio para los inexpertos programadores.

Seguramente ahora que la perrada lee estas líneas dirá: "y esto monos ¿quiénes son?", la cultura musical es tan diminuta debido a que los grandes programadores de las estaciones actuales están completamente de lado de los productos digeribles y arrojados al jugo gástrico, los formatos de 40 canciones, alta rotación y música de catálogo hacen vomitiva la propuesta musical que se escucha en la radio hoy día.

Ahora en descargo de las estaciones y de los puristas de los medios, ésto no tiene solo que ver con el pensamiento maquiavélico de la industria radiofónica, que se sienta en sus enormes sillas a decidir que canción es la que van a colocar en el corte de la mañana, si no también es culpa de la industria discográfica que ha fomentado sin ton ni son la payola y a la gran cantidad de dádivas que ofrecen a estas estaciones para que suene 100 veces Enrique Iglesias, o Wisin y Yandel.

Pero chequen como producen los gabachos sus spots ...

Ahora chequen esta belleza, bueno orgullo...

La La perrada del mal también hace su chamba, pidiendo una y otra vez a la estación que le ponga "17 años" de los Ángeles Azules, la última de los Recoditos, unas salsitas bien buenas o peor aún y para que el dueño de este gástrico espació tenga razón para asistir a evacuar, poner una rola de los éxitos de Cristian Castro, que YA ESTA A LA VENTA ¡Cómpralo Ya!

Está en los gástricos que formamos parte de este espacio dar voz a los que realmente valgan la pena, no solo en el ámbito musical, sino en todos los ámbitos de esta sociedad, solo cuando todo el mundo conozca a que sabe la miel entenderán que esta no está destinada para el hocico de los cerdos.

Pero ya saben todo es una eterna Kabula…..